Emociones y personalidades en los vinos vascos
El mundo de los vinos vascos lleva ofreciendo muchas emociones en las últimas añadas. Los tres territorios muestran su personalidad única. En la zona Alavesa del Valle de Arrastaria, el viticultor Juanjo Tellaetxe recupera el modo tradicional que se trabajaba en esos viñedos. Sólo se puede ser universal si se respeta lo más pequeño y local.
Reivindicando lo autóctono y respetando la diversidad
Este reivindicador de lo autóctono lee las parcelas familiares y deja que se expresen conforme a clima y tipicidades propias. No hay nada mejor ni peor en el mundo enológico, solo distinto. Así, la hondarribi zuri alavesa es la que es, y su frutosidad, su justa acidez, son colofón de lo que nace en el campo.
Mínima intervención y elaboración cuidadosa
Hoy, lo que hace escrupulosamente este elaborador es seguir el canon de la casi nula intervención, que pasa por la vendimia manual y el trabajo en bodega suave y respetuoso con levaduras autóctonas; además con corta crianza sobre las lías.
- Vino blanco: Este vino tiene un corte agradable con delicadas notas florales y cítricas, y un directo beber.
- Regusto amargo: Su regusto amargo tan característico es ideal para añorar ese terruño alavés y disfrutar de los buenos momentos marineros del invierno.
- Adquiriendo nuevos matices: Para los impacientes, no deben olvidar que la propia vida del vino va siempre adquiriendo nuevos matices. Como dice Teilletxea, todo es el fruto de «los suelos de nuestros valles».
Datos del vino
- Bodega: Tantaka
- Vino: Blanco 2022
- D.O.: Arabako Txakolina
- Pvp: 15 euros
- Sitio web: www.tantaka.eus
Be the first to comment